Con este nuevo impulso el barco a vuelto a recuperar empaque y firmeza, se le ha rejuvenecido de tal manera que a nosotros nos sorprende.
Ahora queda limpiar el casco y mirar el estado de la orza, es fundamental conocer en que condiciones se encuentra todo el mecanismo de anclaje e izado del la orza, saber en que estado de fatiga están todas los elementos y piezas, analizar que tipo se corrupción (si existe)hay en el casco y especialmente en las áreas donde han sido incrustados los anclajes.
Todo esto es muy importante , no hay que dejar por pereza de preparan la embacarción en su estado óptimo, ya que si queremos navegar en las aguas del Estrecho, necesitamos ir muy seguros para no partir nada.
Los cabos se van colocando cada uno en su lugar, en la fotografía vemos como distintas drizas llegan hasta el final del palo, también comenzamos a izar el enrrollador donde hemos introducido la jarcia del foque.
Los cabos salen del mástil, para protegerlo en su esfuerzo necesitamos colocarle al mástil un guía-cabo para que no roce con el filo lacerante del orifico del mástil.
Los cabos salen del mástil, para protegerlo en su esfuerzo necesitamos colocarle al mástil un guía-cabo para que no roce con el filo lacerante del orifico del mástil.
Mientras trabajamos vamos tomando nota de otras necesidades menores, como es ver el estado del perno de la botabara y el ancaje del tintero al mástil.
Para estas tareas hemos necesitado comprar herramientas, que van a formar parte del equipamiento del barco.
Este es el reloj de Carlos (era sábado 24-7-2010) que marcaba las 18:34 y también se puede observar que faltaban 64 días para la maratón de Berlin , debeis saber que Carlos es un gran deportista en general y especialmente un fabuloso corredor de maratón.
El tiempo transcurre sin sentir. Paso a paso montamos el enrrollador, Pedro ajusta las uniones interiores de los perfiles que contien el stay de proa.


Juanjo y Pedro dispuestos a fijar el tambor del enrrollador a la proa.
Juanjo coloca la placa de ajuste de tensión del stay.
Al final del día el barco va tomando cuerpo, necesita más tiempo, como todo lo que nos gusta.
Compramos los cabos en tres tiendas diferentes, en San Roque (Náutica-Sotogrande) , Estepona y en La Línea (Lineamar). Adquirimos cabos para todas la maniobras, elegimos los colores que Carlos deseaba. Estamos muy contento con los cabos, pues desde cuando lo colocamos hasta hoy lo hemos probado lo sufuciente como para estar seguro que son buenos, y del precio ni nos acordamos.
Carlos va en busca de las escotas del foque. Las comprará en La Línea de la Concepción en la tienda náutica Lineamar. En su mano sostiene un cabo con las medidas y todo el patrimonio económico del "Tanita". Él, una vez en la tienda decidirá cuantos metros comprará .
Mientras tanto nosotros seguimos con la tarea de colocar todos los cabos. He sacado los cabos viejos de la embarcación y nos disponemos a aliviar de peso y de suciedad el barco, algunos cabos se quedaran a bordo y formarán parte del recurso fundamental que es la "chaca" que es algo así como todo lo que necesitas en el momento para un apaño lo encontrás en el cajón de la chasca.
Estos son los cabos para las escotas del foque que Carlos acaba de comprar,listos para estrenarlos.
La tarea continua y esta vez toca colocar una guía para los cabos de los rizos( que en un despiste hemos sacado uno de los viejos), para ello utilizamos una guía flexible y firme a la vez como la utilizan los electricistas.
Pedro y Carlos sonrientes después de haberlo conseguido no sin algún momento de impaciencia.